la Voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta
¿Cómo puede ayudarme la Biblia a abandonar deudas de tarjetas?
¿Te has sentido alguna vez tentado por el uso de la tarjeta de crédito?
¿Has caído en la trampa de comprar cosas que no necesitás, o que no podés pagar, solo porque querés tenerlas?
¿O bien has sufrido las consecuencias de acumular deudas, intereses y multas, que te han llevado a una situación de estrés y angustia?
Si tu respuesta es sí, quiero decirte que no estás solo.
Muchas personas hoy en día sufren por el problema del mal uso de la tarjeta de crédito, y no saben cómo salir de él.
El uso de la tarjeta de crédito puede ser una herramienta útil, pero también puede ser una trampa peligrosa.
Una trampa que te aleja de la voluntad de Dios para tu vida.
Pero también quiero decirte que hay una solución.
Hay una manera de usar la tarjeta de crédito de forma responsable, y de vivir en la paz y la bendición de Dios.
Conocer la voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjetas puede ayudarte.
Podés administrar tus recursos económicos de acuerdo con sus principios y sus promesas.
En este artículo, te compartiré 3 aspectos de la voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta.
Y ellos te ayudarán a usar la tarjeta de crédito de forma sabia y prudente.
1. La Voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta: Contentamiento
El primer aspecto de la voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta es que estés contentos con lo que tenés.
¿Qué significa estar contentos con lo que tenés?
Significa estar satisfecho y agradecido por las cosas que Dios te ha dado, y no codiciar las cosas que no tenés, o que no podés tener.
La voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta claramente indica que es bueno vivir de acuerdo con tus posibilidades, y no gastar más de lo que ganás.
¿Por qué debés estar contentos con lo que tenés?
Porque la Biblia dice que estar contentos con lo que tenés muestra tu confianza en Él y tu amor a Él.
Hebreos 13:5 dice:
“Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré”
Cuando estás contentos con lo que tenés, demostrás tu confianza en la fidelidad y la provisión de Dios.
Y así expresás tu amor a Dios y a los demás.
También evitás caer en la idolatría del dinero, que te aparta de Dios.
¿Cómo podés estar contentos con lo que tenés? Siguiendo algunos consejos prácticos, como:
- Hacé un presupuesto mensual, donde anotar tus ingresos y tus gastos, y asegurarte de no gastar más de lo que ganás.
- Ahorrá una parte de tus ingresos, para tener un fondo de emergencia, e invertir en tu futuro, o para dar a los demás.
- No usés la tarjeta de crédito como una forma de financiar tus caprichos, sino como una forma de pagar tus necesidades.
- Usá la tarjeta de crédito solo cuando tengás la certeza de que podrás pagar el saldo total cada mes, sin acumular intereses.
- No te comparés con otros, y evitá la influencia de la publicidad, incitándote a comprar lo que no necesitás, o que no podés pagar.
- Agradecé a Dios por todo lo que tenés, y reconocé que todo es un regalo de su gracia.
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2. Fidelidad
La voluntad de Dios es que seás fiel en lo poco y en lo mucho
El segundo aspecto de la voluntad de Dios contenida en la Biblia es que seás fieles en lo poco y en lo mucho.
¿Qué significa ser fiel en lo poco y en lo mucho?
Significa ser honesto, diligente, prudente y generoso con el dinero que Dios te ha dado, sea mucho o poco.
La voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta nos enseña lo apropiado de reconocer que el dinero es un recurso que Dios te ha confiado, y que debés usarlo para su gloria.
Por supuesto, también para el bien de tu familia y para el beneficio de los demás.
¿Por qué debés ser fiel en lo poco y en lo mucho?
Porque la Biblia dice que ser fiel en lo poco y en lo mucho es una cuestión de justicia y de recompensa.
Lucas 16:10-11 dice:
“El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto. Pues si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿quién os confiará lo verdadero?”
Cuando sos fiel en lo poco y en lo mucho, estás siendo justo con Dios y con los hombres
Y te preparás para recibir lo verdadero, que es el reino de Dios.
¿Cómo podés ser fiel en lo poco y en lo mucho? Siguiendo algunos consejos prácticos, como:
- Escribí un inventario de tus deudas, anotando a quién le debés, cuánto le debés, y cuándo tenés que pagarle.
- Hacé un plan de pago, estableciendo prioridades, plazos y metas, para ir saldando tus deudas de forma ordenada y progresiva.
- Negociá con acreedores, si es posible, por mejores condiciones: reducir intereses, ampliar plazos, o consolidar deudas.
- Buscá fuentes de ingresos adicionales, si es necesario, para aumentar tu capacidad de pago: hacé horas extras, vendé cosas que no usás, o emprendé algún negocio.
- No contraigás nuevas deudas antes de haber pagado las anteriores, para no aumentar tu nivel de endeudamiento, sino reducirlo.
3. La Voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta: Confianza
La voluntad de Dios es que confiés en su provisión y no te angustiés por el dinero
El tercer y último aspecto de la voluntad de Dios contenida en la Biblia es que confiés en su provisión y no te angustiés por el dinero.
¿Qué significa confiar en su provisión?
Significa creer que Dios es tu Padre, que te ama, que te conoce, y que te da todo lo que necesitás.
También significa reconocer que Dios es el dueño de todo, que te ha dado la capacidad de trabajar, y que te bendice con sus bienes.
Cuando entendás la voluntad de Dios en la Biblia para deudas de tarjeta sabrás que es apropiado agradecer a Dios por todo lo que tenés, y devolverle una parte en forma de diezmos y ofrendas.
¿Por qué debés confiar en su provisión?
Porque la Biblia dice que confiar en su provisión es una cuestión de fe y de esperanza.
Mateo 6:31-33 dice:
“Así que no se preocupen diciendo: ‘¿Qué comeremos?’ o ‘¿Qué beberemos?’ o ‘¿Con qué nos vestiremos?’. Porque los paganos andan tras todas estas cosas y el Padre celestial sabe que ustedes las necesitan. Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas”
Cuando confiás en su provisión, estás demostrando tu fe en su poder y en su bondad, y estás poniendo tu esperanza en su reino y en su justicia.
También estás recibiendo su paz, que sobrepasa todo entendimiento.
¿Cómo podés confiar en su provisión? Siguiendo algunos consejos prácticos, como:
- Orá a Dios por tus necesidades, y pedíle que te guíe, que te provea y que te proteja. La Biblia dice en Filipenses 4:6-7:
“No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús”
- Buscá el reino de Dios y su justicia, y ponélo como tu prioridad en la vida. La Biblia dice en Mateo 6:33:
“Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas”
Esto implica obedecer a Dios, servirle, adorarle y compartir su amor con los demás.
- Dá a Dios el diezmo, que es el 10% de tus ingresos, que le pertenece a Él y que debés entregarle a través de la iglesia. La Biblia dice en Malaquías 3:10:
“Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde”
- Sé generoso con los demás, y compartí con ellos lo que tenés, especialmente con los que tienen necesidades. La Biblia dice en 2 Corintios 9:6-8:
“Recuerden esto: El que siembra escasamente, escasamente cosechará, y el que siembra en abundancia, en abundancia cosechará. Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría. Y Dios puede hacer que abunde en ustedes toda gracia, a fin de que siempre, en toda circunstancia, tengan todo lo necesario, y toda buena obra abunde en ustedes”
Conclusión
Espero que este artículo te haya sido de ayuda, y que podás aplicar estos principios bíblicos en tu vida financiera.
Te invito a que compartás este artículo con tus amigos y familiares, para que ellos también puedan conocer y vivir la voluntad de Dios sobre las deudas.
Y te invito, finalmente, a que me dejés un comentario, contándome cómo te ha ido al aplicar algo de este artículo, y cómo te puedo ayudar.
Que Dios te bendiga.